Academia de Ciencias Matemáticas, Físico-Químicas y Naturales


Cierre del acto de ingreso en la Academia del Ilmo. Sr. D. Luis Fermín Capitán Vallvey realizado por el Excmo. Sr. Presidente de la Academia



Excmo. Sr. Rector, Iltmas. Autoridades, Compañeros Académicos, Sras y Sres.

Hoy nos cabe el placer y el honor de incorporar como Académico al Dr. Luis Fermín Capitán, un apellido brillantemente vinculado a la Academia. El Dr. Luis Fermín ha logró la modernización de la docencia de la Química Analítica y alcanzó, un notable nivel investigador. Todo esto ha sido documentado magníficamente por la defensa. El Iltmo compañero D. Fernando Camacho, en nombre de la Academia ha sabido dar, una vez más, con las palabras y las ideas justas, mostrando el acierto de la propuesta unánime como académico del Dr. Luis Fermín Capitán, gracias.

Las fuentes de la ciencia europea

Nuestra Ciencia y Cultura bebieron de las caudalosas fuentes griega y romana. No obstante y en justicia, cada vez son más los que sugieren que la etapa más obscura de la humanidad no hubiese podido traspasarse, con rapidez, sin la fuente cristiana. Pero es a partir del siglo XX, cuando se puede decir que el papel más relevante lo ocupa la economía, la libertad y la democracia, hijas propias de la ilustración.
La Ilustración como “fuente” tiene su soporte en la Ciencia, que cada vez va a ocupar un espacio más relevante en el discurso y evolución de los pueblos. En este año dedicado a la Ciencia es justo y necesario destacar el papel señero que la Universidad ocupa como manantial. Es usual admitir que la Universidad es la generadora de esta nueva Cultura y, por ello, sería muy importante acertar en la enorme tarea que se avecina de integrar la Universidad en el espacio europeo.
Los objetivos de la integración son magníficos la “compatibilidad y la comparabilidad” de los sistemas de educación superior, pero las dificultades de un cambio tan radical, tal y como se pretende, son impresionantes. En especial, por el poco amor a los cambios trascendentes que profesa la Sociedad española y por la falta de claridad en el “rumbo” para realizarlo. La Sociedad tiene la impresión que el cambio es necesario, porque la Universidad no cumple bien con su función.
La Academia de Ciencias quiere dejar oír su palabra en el sentido de destacar que jamás en su pequeña historia la Universidad tuvo tan magníficos Profesores e Investigadores, que se trata de otra cuestión más simple e importante definir y compartir el EEES.
Para colaborar con el año dedicado a la Ciencia y con el EEES, los Académicos proponemos como referente europeo al físico francés Pierre - Gilles De Gennes. Gilles De Gennes fue premiado con el Nobel de Física 1991, por su obra sobre los “cristales líquidos”. Gilles dedicó su vida a la investigación, primero, y a la difusión de la física (esencialmente su divulgación) en sus últimos años. Sus características como científico le hacen hoy especialmente acreedor de reconocimiento y sería razonable proponerlo como “referente de científico europeo”. Inicialmente su madre, perdió pronto a su padre, se encargó de que aprendiera inglés, literatura e historia, desde muy niño.
Después de una primera incursión investigadora en energía atómica, estudió en Berkeley con Charles Kittel, el gran maestro de la física de los sólidos. Esto le marcaría para siempre, como sugieren sus posteriores descubrimientos sobre “cristales líquidos”, sus incursiones en “superconductividad” y en la “física de los polímeros”. Finalmente, las notas que le hacen tan actual para la Ciencia, piensan los Academicos son las siguientes:
  • Fue un investigador de “equipo”, característica básica de la modernidad investigadora (formó un equipo con brillantes investigadores). Realmente en el equipo no era el jefe, sino el “sensibilizador” de las investigaciones.
  • Unió a teóricos y experimentales, dando especial valor al “objetivo industrial (aplicado) de la Física” y distinguiendo siempre lo importante para la Sociedad de lo “baladí”.
  • Y, por último, tuvo en grado superlativo la “curiosidad del científico”, siendo un gran “divulgador de la Ciencia”, en especial, después de recibir el Nobel de Física.
De Gennes fue miembro de la Academia de Ciencias francesa, alemana y estadounidense y en este año de la Ciencia parece oportuno recordar a un físico aplicado, a quien la Academia Sueca comparó con el “Isaac Newton del siglo XX”. Gilles reconoció con humildad que la comparación era exagerada, pues Newton a los 18 años había inventado el telescopio; a los 20, después de comprender la óptica interferencial, interpreta la “gravitación universal” y el “movimiento de los planetas”. En fin, el mismo reconoce humildemente que estaba a otra altura. No obstante, la Academia de Ciencias considera que es uno de los personajes cimeros de la “ilustración y del renacimiento científico del siglo XX”. Sería oportuno y justo que su estela inspirase la integración en el EEES, por otra parte, tan falta de rumbo.
La Academia de Ciencias hace suya la frase de Ortega y Gasset, sacada de contexto: “el hombre, a diferencia de los animales, tiene pasado”. Y ese pasado, se piensa en esta Academia, debe tener un importante valor de futuro.
Amigos aquí reunidos, sin olvidar el pasado, aceptemos con entusiasmo el cambio que conlleva la integración en el EEES. La Academia de Ciencias considera que es una magnifica ocasión para la Universidad de contribuir a los “Estados Unidos de Europa en la Enseñanza y la Investigación Superior”. Tomemos como referencia a De Gennes e intentemos que así sea. En otro caso, la Sociedad lo podría demandar dramáticamente.